RELIEVE DE LA CIRCUNCISIÓN DE JESÚS

Este relieve dedicado a la Circuncisión de Jesús a juzgar por la modestia de sus dimensiones pudo formar parte del banco de un retablo de la Pasión de Cristo, quizás originario de Amberes, donde frecuentemente solía incorporarse este episodio como una premonición de futuros padecimientos del Salvador.
La escena se ordena en torno al diminuto altar que apoya sobre una columna poligonal, donde se asienta el cuerpo de Cristo, sujeto delicadamente por la Virgen, quien lo toma por los brazos. María se sitúa a la izquierda, inclinada en un elegante ademán, y está lujosamente vestida con una larga túnica de escote amplio y recto, complementada con una camisa de mangas anchas de las que le cuelgan largas tiras de tela, y un hermoso tocado, sujeto con rodetes, indumentaria habitual en las primeras décadas del siglo XVI. Frente a ella, se dispone el sacerdote, que también se inclina levemente, revestido con holgados ornamentos y ancha mitra, para proceder a la delicada operación.