Catálogo

RETABLO DE LAS NAVAS DE TOLOSA

La Capilla de las Navas ocupa un ángulo del claustro
© J. Muñiz Petralanda  CC-BY-NC-ND

HISTORIA 

Un documento conservado en el Archivo Vaticano, nos facilita la noticia de quien fue el fundador de la capilla del Monte Olivete donde se alojaba este retablo, que estaba emplazada en el templete dispuesto en un ángulo del claustro catedralicio.
Según declara este texto, fechado en 1459, la iniciativa partió de don Juan de Beaumont, un sobresaliente personaje que era tío del heredero al reino, el Príncipe de Viana, de quien fue educador y que también ocupó los cargos de Canciller y gobernador del reino y Prior de la Orden de Jerusalén. En aquella fecha, Beaumont encomienda a Juan de Subiza, secretario del príncipe, quien se encontraba de viaje en Roma, que trasladase una petición al cardenal Besarión, obispo de la Diócesis, para la creación de la capilla.
Hasta 1960 el retablo permaneció en su ubicación original, pero al suprimirse el culto en la capilla, se trasladó hasta las dependencias del Museo Diocesano, instalándose en concreto en el antiguo refectorio de la catedral.